Hoy vamos a desmentir algunos de los principales mitos sobre la quiropráctica, una disciplina de salud que sigue rodeada de malentendidos. Para algunos, es una solución efectiva y natural para el dolor de espalda y otros problemas musculoesqueléticos; mientras que para otros, se percibe con escepticismo e incluso desconfianza.

Estos mitos pueden llevar a conclusiones erróneas sobre sus beneficios, riesgos y funcionamiento real, influyendo en la decisión de quienes podrían beneficiarse de un tratamiento. En este artículo, desmentiremos algunos de los mitos más comunes sobre la quiropráctica, brindando una visión fundamentada. Desde Quiropráctica Thomsen queremos ayudarte a comprender en qué consiste realmente esta disciplina y cómo puede contribuir a tu bienestar físico.

Mitos sobre la quiropráctica: Solo sirve para el dolor de espalda

Uno de los principales mitos sobre la quiropráctica es que se enfoca únicamente en tratar el dolor de espalda. Pero esta afirmación es un error que limita la comprensión de su verdadero alcance. Es cierto que muchos pacientes buscan la quiropráctica para aliviar molestias en la espalda. Sin embargo, ofrece beneficios más amplios y puede ser útil en el tratamiento de diversas condiciones que afectan el sistema musculoesquelético y el sistema nervioso.

Tratamiento de dolores de cabeza y migrañas

Los ajustes quiroprácticos pueden ser efectivos para aliviar dolores de cabeza y migrañas; especialmente cuando estos están relacionados con la tensión en la zona cervical (cuello) o una mala alineación vertebral. Al mejorar la movilidad de las vértebras del cuello y reducir la tensión muscular, la quiropráctica disminuye la frecuencia y la intensidad de estos dolores.

Pacientes que pasan largas horas frente al ordenador pueden experimentar dolores de cabeza tensionales debido a la rigidez en el cuello y los hombros. Un quiropráctico puede ajustar la columna cervical y enseñar ejercicios para mejorar la postura y reducir la tensión, proporcionando un alivio significativo de los síntomas.

Corrección de problemas de postura

La quiropráctica es altamente efectiva para corregir problemas de postura que pueden surgir debido a hábitos de vida sedentarios o trabajos de oficina. Los ajustes quiroprácticos ayudan a realinear la columna vertebral, lo que mejora la postura y alivia la presión sobre los músculos y articulaciones.

Personas que sufren de síndrome de la cabeza adelantada u hombros encorvados debido al uso prolongado de dispositivos móviles, pueden beneficiarse de los ajustes quiroprácticos; reduciendo así el riesgo de futuras molestias musculares y articulares.

Lesiones deportivas y mejora del rendimiento físico

Los quiroprácticos también son clave en la rehabilitación de lesiones deportivas. Trabajan para mejorar la movilidad articular y reducir el tiempo de recuperación de lesiones como esguinces, tendinitis o dolor muscular por sobreuso. Esto permite a los deportistas recuperar su forma física de manera más rápida y segura.

Además de tratar lesiones, la quiropráctica puede ser una herramienta útil para mejorar el rendimiento físico. Al mantener una alineación adecuada de la columna y las articulaciones, los atletas pueden mejorar su flexibilidad, equilibrio y coordinación.

Un corredor que sufre de dolor en la rodilla debido a un desequilibrio en la pelvis podría beneficiarse de los ajustes quiroprácticos para alinear su cadera. Así podrá reducir el impacto sobre las articulaciones y mejorando su técnica de carrera.

Alivio del dolor en otras articulaciones

La quiropráctica no se limita a la columna vertebral; también puede abordar problemas en otras articulaciones, como hombros, caderas, rodillas y tobillos. Al ajustar y movilizar estas áreas, un quiropráctico puede reducir el dolor y mejorar la función articular, permitiendo una mayor movilidad y calidad de vida.

Personas que sufren de dolor de hombro debido a una lesión de manguito rotador pueden beneficiarse de la quiropráctica para mejorar la movilidad de la articulación y reducir la inflamación.

Mitos sobre la quiropráctica: Es dolorosa y peligrosa

Otro de los mitos sobre la quiropráctica más comunes es la creencia de que los ajustes quiroprácticos son dolorosos y peligrosos. Sin embargo, esta percepción dista mucho de la realidad. Los ajustes quiroprácticos están diseñados para ser seguros y efectivos, y la mayoría de los pacientes experimentan alivio durante y después de sus sesiones.

A continuación, desmentimos este mito explicando cómo funcionan los ajustes y qué puedes al recibir tratamiento de un quiropráctico profesional.

• Técnicas seguras y personalizadas: Los quiroprácticos son profesionales de la salud que han recibido una formación extensa en anatomía, fisiología y técnicas de ajuste manual. Esto les permite identificar las necesidades específicas de cada paciente y adaptar los ajustes para que sean seguros y efectivos. Un quiropráctico certificado sabe exactamente cómo aplicar la presión adecuada en el lugar correcto, evitando cualquier riesgo de lesión.
• ¿Qué se siente realmente durante un ajuste quiropráctico?: Muchos pacientes asocian los ajustes quiroprácticos con el sonido de un «crujido», lo que les hace pensar que puede ser doloroso. Sin embargo, ese sonido es simplemente la liberación de gases (como nitrógeno y dióxido de carbono) de las articulaciones.
• Seguridad de los ajustes quiroprácticos: Los ajustes quiroprácticos son no invasivos y, cuando son realizados por un profesional certificado, los riesgos son mínimos. Al ser un tratamiento que no implica medicamentos, la quiropráctica evita los efectos secundarios asociados con el uso prolongado de medicamentos para el dolor. Los quiroprácticos realizan una evaluación exhaustiva del paciente para garantizar un ajuste seguro.
• Reducción del dolor: Uno de los principales objetivos de los ajustes quiroprácticos es reducir el dolor en zonas como la espalda, el cuello y las articulaciones. Al mejorar la alineación de la columna y restaurar el movimiento de las articulaciones, los quiroprácticos alivian la presión sobre los nervios, reduciendo la inflamación.

Mitos sobre la quiropráctica: No existe evidencia científica

El siguiente de los mitos sobre la quiropráctica es la creencia de que carece de respaldo científico. Este es un concepto erróneo que merece ser aclarado. En las últimas décadas, se han realizado numerosos estudios científicos que demuestran la eficacia de la quiropráctica en el tratamiento de diversas condiciones musculoesqueléticas; especialmente en el manejo del dolor de espalda, cuello y dolores de cabeza.

A continuación, presentamos algunas de las investigaciones más relevantes que apoyan los beneficios de la quiropráctica para la salud.

Estudios científicos sobre el tratamiento del dolor de espalda

• Revisión Cochrane sobre el dolor lumbar: Una de las revisiones más importantes proviene de la Cochrane Library, una de las instituciones más prestigiosas en el análisis de evidencia médica. Esta revisión evaluó el uso de la manipulación espinal para el tratamiento del dolor lumbar y encontró que los ajustes quiroprácticos son una opción efectiva.
• American College of Physicians: El American College of Physicians recomienda la manipulación espinal como una de las opciones no farmacológicas para el manejo del dolor lumbar crónico. Esto subraya que la quiropráctica es reconocida dentro de la medicina basada en la evidencia como una opción válida para tratar el dolor de espalda.

Quiropráctica en el tratamiento de dolores de cuello y cervicalgia

• Estudio de la Journal of Manipulative and Physiological Therapeutics: Un estudio publicado en esta revista evaluó la eficacia de la manipulación espinal para el tratamiento de la cervicalgia (dolor de cuello). Los resultados mostraron una mejora significativa en los pacientes que recibieron ajustes quiroprácticos en comparación con aquellos que solo siguieron ejercicios de estiramiento. Los pacientes reportaron una reducción del dolor y una mayor movilidad en la zona cervical.
• Efectividad comparada con otros tratamientos: Varios estudios han demostrado que la quiropráctica puede ser igual o más efectiva que la fisioterapia y los medicamentos antiinflamatorios; ofreciendo una alternativa segura y sin los efectos secundarios asociados a algunos fármacos.

La quiropráctica para el tratamiento de dolores de cabeza

• Estudios sobre migrañas y cefaleas tensionales: La quiropráctica también ha demostrado ser útil en el tratamiento de cefaleas tensionales y algunos tipos de migrañas. Un estudio publicado en la Journal of Manipulative and Physiological Therapeutics mostró que pacientes que recibieron tratamientos quiroprácticos experimentaron una reducción de dolores de cabeza.
• Mecanismo de acción: Los ajustes quiroprácticos pueden aliviar las cefaleas al reducir la tensión muscular en la zona cervical y mejorar la alineación de las vértebras del cuello: lo que disminuye la presión sobre los nervios y los vasos sanguíneos que pueden desencadenar el dolor de cabeza.

Reducción del uso de medicamentos

• Reducción de medicamentos: La quiropráctica se ha asociado con una disminución del uso de medicamentos analgésicos y antiinflamatorios; especialmente importante para quienes buscan una opción natural y libre de fármacos para el manejo del dolor. Un estudio realizado en Estados Unidos mostró que los pacientes que combinaban la quiropráctica con su tratamiento tradicional utilizaban menos opioides para el dolor crónico.
• Enfoque no invasivo y preventivo: Además de reducir la necesidad de medicamentos, la quiropráctica también ofrece un enfoque preventivo. Esto la convierte en una opción atractiva para quienes desean abordar las causas subyacentes del dolor, en lugar de solo tratar los síntomas.

Mitos sobre la quiropráctica: No es segura para personas mayores

Uno de los mitos de la quiropráctica más ridículos y a la vez más extendidos es que es una práctica peligrosa para personas mayores.
Esta creencia no solo es incorrecta, sino que también priva a muchos adultos mayores de los beneficios que la quiropráctica puede ofrecerles; especialmente en lo que se refiere a aliviar el dolor articular y mejorar la movilidad.

A continuación, desmentimos este mito y explicamos cómo la quiropráctica es una opción segura y eficaz para personas mayores.

Adaptación de las técnicas para cada paciente

• Enfoque personalizado: Los quiroprácticos están capacitados para adaptar sus técnicas de acuerdo con las necesidades y la condición física de cada paciente. Esto significa que los ajustes se realizan de forma suave y con menos presión, enfocándose en mejorar la movilidad y aliviar la tensión muscular.
• Técnicas específicas para adultos mayores: Algunos quiroprácticos utilizan técnicas como la activación con instrumentos, que permiten realizar ajustes precisos con un dispositivo pequeño, en lugar de aplicar presión manual directa. Esto hace que los tratamientos sean aún más suaves y adecuados para aquellos que puedan tener fragilidad ósea o condiciones como la osteoporosis.

Beneficios de la quiropráctica para oersonas mayores

• Alivio del dolor articular: Las personas mayores suelen experimentar dolores articulares crónicos, especialmente en las rodillas, la espalda y el cuello. La quiropráctica puede ser una herramienta muy efectiva para reducir la inflamación y mejorar la función de las articulaciones afectadas por el paso del tiempo. Esto no solo contribuye a una mejor calidad de vida, sino que también permite que los pacientes sigan siendo activos.
• Mejora de la movilidad y la flexibilidad: A medida que envejecemos, la movilidad tiende a disminuir, lo que puede limitar la capacidad de realizar actividades diarias. Los ajustes quiroprácticos, combinados con ejercicios de movilidad, pueden ayudar a restaurar el rango de movimiento en las articulaciones y a mantener una postura adecuada.
• Reducción del riesgo de caídas: Las caídas son una preocupación común entre las personas mayores, y mantener una buena alineación corporal puede reducir el riesgo de perder el equilibrio. Al mejorar la postura y el equilibrio, la quiropráctica puede contribuir a que los adultos mayores se sientan más seguros y estables al caminar.

Quiropráctica y condiciones relacionadas con la edad

• Osteoporosis y otros problemas óseos: Si bien la osteoporosis es una preocupación en la edad avanzada, esto no significa que la quiropráctica esté contraindicada. Los quiroprácticos tienen la formación necesaria para trabajar con pacientes que tienen huesos frágiles y conocen las técnicas más adecuadas para tratar estas condiciones.
• Artritis: Los tratamientos quiroprácticos ayudan a reducir la rigidez y a mantener la movilidad articular. Esto es especialmente útil en casos de artritis reumatoide y artrosis, donde el objetivo es minimizar el dolor y preservar la capacidad de movimiento.

Seguridad de la quiropráctica para personas mayores

• Evaluación inicial completa: Antes de comenzar cualquier tratamiento, un quiropráctico realiza una evaluación detallada de la salud del paciente; incluyendo la revisión de historial médico, medicación actual y cualquier condición preexistente. Esto asegura que se puedan identificar posibles contraindicaciones y ajustar el tratamiento para que sea lo más seguro posible.
• Investigación científica y recomendaciones médicas: Diversos estudios han demostrado que la quiropráctica es segura y efectiva para personas de todas las edades. Además, muchos médicos recomiendan la quiropráctica como una opción complementaria para tratar el dolor crónico y mejorar la movilidad.

Una vez que empiezas con la quiropráctica, no puedes dejarlo

Uno de los mitos sobre la quiropráctica más persistentes es la creencia de que, una vez que comienzas a recibir tratamiento, no puedes dejarlo. Esta idea errónea sugiere que los pacientes se vuelven dependientes de los ajustes, pero la realidad es muy diferente. La frecuencia y duración del tratamiento quiropráctico varían según las necesidades de cada paciente. El objetivo final siempre es mejorar la función del cuerpo para que pueda mantenerse equilibrado por sí mismo.

A continuación, desmentimos este mito y explicamos en qué consiste un plan de tratamiento quiropráctico.

El Objetivo de la quiropráctica: La autonomía del paciente

• Restaurar el equilibrio del cuerpo: El objetivo principal de la quiropráctica es ayudar al cuerpo a funcionar de manera óptima. A través de los ajustes, se busca restaurar la movilidad articular y mejorar la alineación de la columna; lo que permite que el cuerpo se mantenga equilibrado de forma natural.
• Recuperación y mantenimiento: Una vez que el paciente ha alcanzado una mejora significativa en su condición, las visitas quiroprácticas pueden reducirse gradualmente. Los quiroprácticos trabajan para que el cuerpo del paciente logre sostener sus mejoras con menor asistencia externa; permitiendo a cada persona decidir si desea continuar con un mantenimiento ocasional.

Frecuencia de las visitas: Plan personalizado para cada paciente

• Variabilidad según la condición: La frecuencia de las visitas quiroprácticas depende de varios factores, como la severidad de la dolencia, la edad del paciente, y la respuesta al tratamiento.
• Ejemplo práctico: Un deportista que ha sufrido una lesión podría beneficiarse de una serie de ajustes iniciales para acelerar su recuperación. Sin embargo, una vez que su condición mejora, las visitas pueden reducirse a sesiones mensuales o trimestrales, según sus necesidades y objetivos personales.

El proceso de transición a visitas de mantenimientot

• Fase inicial de tratamiento: Durante las primeras semanas, el quiropráctico puede recomendar visitas más frecuentes para abordar el problema subyacente de manera efectiva. Esta fase es similar a la terapia física, donde se requiere un enfoque más intensivo para iniciar la recuperación.
• Disminución gradual de las sesiones: A medida que el paciente mejora, el quiropráctico suele reducir la frecuencia de las visitas. Esto se debe a que el cuerpo ha comenzado a mantener la alineación y la movilidad articular por sí mismo. Las visitas de mantenimiento se enfocan en prevenir recaídas y en optimizar la función del cuerpo para que pueda resistir mejor las tensiones diarias.

Mantenimiento quiropráctico: Una opción, no una obligación

• No todos los pacientes optan por el mantenimiento: Algunas personas eligen seguir con visitas periódicas para mantener su cuerpo en equilibrio óptimo. Sin embargo, esto no significa que sea una obligación para todos los pacientes.
• Beneficios del mantenimiento: Las sesiones de mantenimiento pueden ser beneficiosas para quienes desean mejorar su calidad de vida a largo plazo, pero siempre es una decisión personal. El quiropráctico educa al paciente sobre los beneficios de continuar con ajustes periódicos, pero la elección de hacerlo es del paciente.

El mito de que la quiropráctica genera dependencia es una idea equivocada que subestima el verdadero propósito de esta disciplina. El objetivo de un quiropráctico es empoderar al paciente para que su cuerpo recupere el equilibrio y pueda funcionar correctamente por sí mismo. Aunque algunas personas eligen mantener visitas regulares para optimizar su bienestar y prevenir problemas, no existe una obligación de continuar con el tratamiento indefinidamente.

La quiropráctica es una solución de salud que la ciencia evidencia